lunes, 18 de junio de 2012

Si quieres ayunar pero no te dejan o no puedes, lee esto:

Lo primero,NO ENTRES EN LA COCINA. Cuanto menos contacto tengas con la comida, mejor.
Comienza el día haciendo ejercicio (una hora mínimo) y bebe mucho agua.
SI TUS PADRES NO ESTÁN EN CASA Y TIENES GANAS DE COMER:
- Lee un libro, tuitea, haz flexiones, ponte a ver la tele, juega a la consola, haz cualquier cosa menos comer.
- Si tienes muchas, muchas, muchas ganas de atacar tu nevera, sal de casa, vete a dar un paseo, vete a alguna tienda de ropa y contempla las prendas que te gustaría ponerte y no puedes por gorda, pero bajo ningún concepto comas.
- Si tienes Tumblr entra en él y rebloggea cosas, si no tienes hazte uno (si quieres) y busca thinspo, ya verás lo rápido que se te quita el hambre.
SI TUS PADRES ESTÁN EN CASA Y TE VAN A OBLIGAR A COMER:
- Diles que has quedado para comer con una amiga o un amigo y vete a dar un paseo por la calle, siéntate en un banco mientras escuches música... Pero no te lleves dinero. Acabarás comprando comida.
- Prueba a masticar la comida y disimuladamente escúpela en una servilleta o en un vaso opaco. (A mí eso no me ha servido mucho, pero si a alguna la funciona o lo quiere probar...)
- Di que te encuentras mal del estómago o que tienes diarrea.
SI YA TE OBLIGARON A COMER Y ERES MIA:
- Di a tus padres que "te vas a dar una ducha antes de que comiences a hacer la digestión" y ve al baño lo más rápido que puedas. Abre el grifo de la ducha y vomita en el WC o en donde más cómoda te sientas usando a Mia. (Yo lo hago mucho en el lavabo)
No es que pueda dar muchas ideas, pero espero que le sirva de ayuda a alguien...

El comienzo.

Desde que era bien pequeña tengo la autoestima baja, más bien creo que nací ya así. Cuando era pequeña siempre fui muy delgada pero cuando se separaron mis padres todo cambió. Mi madre no tenía el dinero suficiente para comprar mucha comida así que siempre compraba pizzas o íbamos al McDonald's. Me pasaba el día en el ordenador jugando a los Sims y cuando no estaba en el ordenador, comía o veía la tele. Los fines de semana mi padre y yo dormíamos en casa de mi abuela y cada vez que iba mi abuela gritaba: "Esta niña se está volviendo obesa, voy a denunciar a su madre por hacerla eso." Yo no me veía tan gorda, pero ella me comparaba con mi prima o con mi mejor amiga y decía que yo tendría que ser tan delgada como ellas y que todas las niñas de mi edad iban muy guapas por la calle y yo iba hecha un adefesio. Yo me sentía fatal cuando me decía eso y nunca quería ir a casa de mi abuela porque siempre me trataba mal. En el colegio siempre me llamaban gorda y cosas de ese tipo, pero no me importaba demasiado, lo que me importaba era lo que me decía mi familia. Cuando llegué al instituto conocí a una chica que era más gorda que yo pero que se ligaba a todos los chicos. Todos nos confundían porque nos parecíamos, pero lo que nos diferenciaba era que yo nunca había tenido novio. Unos meses después un amigo de las dos me confesó que le gustaba mi amiga, yo me sentí celosa porque él me gustaba y no entendía por qué yo no le gustaba si las dos nos parecíamos mucho. Hasta que un día estaba hablando por el chat con el cuando me dijo que se había olvidado de ella y que ahora le gustaba otra. La otra era yo. Me dijo que quería salir con mi amiga para estar cerca de mí. Pero yo sabía que era completamente al revés. Aún así accedí a salir con él. Al día siguiente, en el instituto no me dirigió la mirada yo me quedé mal porque no se quería acercar a mí y sólo me hablaba por el messenger. Así estuvimos una semana entera y al final cortó conmigo. Seguíamos hablando de vez en cuando, pero acabó dejándome de hablar. Dos años después me volvió a hablar y yo caí en sus garras como una tonta, me enamoró tanto que hasta daría mi vida por él. Pero volvió a dejarme de hablar. Me quedé fatal, yo le quería demasiado y no entendía que es lo que había hecho yo para que me dejara de hablar. Llegué a pensar que era porque estaba gorda y decidí cambiar. Me apunté a clases de aeróbic y me pesé. 73 kilos. Vale, para estar bien, me gustaría estar en 50. Ese mismo mes me pusieron la ortodoncia y como me dolía mucho no pude comer durante una semana, me alimentaba de yogur de fresa. Una semana después me volví a pesar y la báscula marcaba 70. Me sentí genial y sabía que esta vez podría adelgazar. Poco tiempo después mi madre se puso enferma del corazón y yo apenas comí nada. Cuando salió del hospital íbamos las dos juntas a andar y cuando ella se iba a casa, yo me iba a clase de aeróbic y muchas veces fui a 3 clases el mismo día. Cuando me di cuenta pesaba 66 y decidí entrar en Fotolog y subir fotos mías para ir viendo mis cambios. Busqué si había gente que hacía lo mismo y busqué "dieta" en Fotolog. ¿Que fue lo que encontré? Cientos de prins. Yo al principio pensaba que eran tontas por querer estar tan delgadas, pero cuando me di cuenta ya estaba metida en eso. Ya no quería pesar 50, mi meta cambió a 45. Poco después estaba en 61 y decidí hacerme un piercing en el ombligo para "animarme". En el instituto, muchos me decían que estaba adelgazando, pero yo me veía igual. Un mes después empecé a ayunar, pero lo máximo que aguantaba eran 3 días. Cuando empezó el siguiente curso yo pesaba 53 y me encontraba genial porque el primer día ya hice nuevas amigas y todos me decían que estaba guapísima y que había adelgazado muchísimo. Todo cambió con los exámenes, me daba atracones y me olvidé de Ana. Pero cuando me di cuenta ya pesaba 61 kilos. Lloré. Me corté. Y empecé a usar mucho a Mia. Cuando podía ayunaba durante una semana, pero acababa dándome atracones y los 61 se fueron convirtiendo en 65 y ahora en 69'8. Me estoy dando cuenta de que estoy igual de gorda que cuando empecé y tengo que cambiar, y por eso. He vuelto a ayunar. Y espero que esta vez consiga mi nueva meta: el 40.